Fragmento de Protágoras de Platón


“…los que llevan las enseñanzas por las ciudades, vendiéndolas y traficando con ellas, ante quien siempre está dispuesto a comprar, alaban todo lo que venden. Mas, probablemente, algunos de éstos, querido amigo, desconocen qué, de lo que venden, es provechoso o perjudicial para el alma; y lo mismo cabe decir de los que les compran, a no ser que alguno sea también, por casualidad, médico del alma. Por lo tanto, si eres entendido en cuál de estas mercancías es provechosa y cuál perjudicial, puedes ir seguro a comprar las enseñanzas a Protágoras o a cualquier otro.

Pero si no, procura, mi buen amigo, no arriesgar ni poner en peligro lo más preciado, pues mucho mayor riesgo se corre en la compra de enseñanzas que en la de alimentos. Porque quien compra comida o bebida al traficante o al comerciante puede transportar esto en otros recipientes y, depositándolo en casa, antes de proceder a beberlo o comerlo, puede llamar a un entendido para pedirle consejo sobre lo que es comestible o potable y lo que no, y en qué cantidad y cuándo; de modo que no se corre gran riesgo en la compra. Pero las enseñanzas no se pueden transportar en otro recipiente, sino que, una vez pagado su precio, necesariamente, el que adquiere una enseñanza marcha ya, llevándola en su propia alma, dañado o beneficiado.”




miércoles, 1 de junio de 2011

JOGO DA VELHA. JUEGO DE LA VIEJA.


Este juego juega con un tablero pintado en una hoja.
Tiene nueve casillas en tres hileras. Cada jugador pinta alternativamente un círculo o una cruz en las casillas, intentando colocar tres círculos o cruces en raya, seguidos. El que lo consigue gana el juego. Cuando no lo consigue pierde  el juego.



Geovanna  Leonel Correia.


2 comentarios:

  1. Hola soy Geovanna. Encarna en este juego cuando la gente, ninguno de los dos competidores gana "se lo da velha" y cuando uno gana hay que decir "jogo da velha" y si no dice perde el juego y el punto va para el otro competidor.
    Tenes otro jogo que publiqué se llama gato mia, mia gato.
    Hasta luego. Geovanna Leonel Correia.

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