Fragmento de Protágoras de Platón


“…los que llevan las enseñanzas por las ciudades, vendiéndolas y traficando con ellas, ante quien siempre está dispuesto a comprar, alaban todo lo que venden. Mas, probablemente, algunos de éstos, querido amigo, desconocen qué, de lo que venden, es provechoso o perjudicial para el alma; y lo mismo cabe decir de los que les compran, a no ser que alguno sea también, por casualidad, médico del alma. Por lo tanto, si eres entendido en cuál de estas mercancías es provechosa y cuál perjudicial, puedes ir seguro a comprar las enseñanzas a Protágoras o a cualquier otro.

Pero si no, procura, mi buen amigo, no arriesgar ni poner en peligro lo más preciado, pues mucho mayor riesgo se corre en la compra de enseñanzas que en la de alimentos. Porque quien compra comida o bebida al traficante o al comerciante puede transportar esto en otros recipientes y, depositándolo en casa, antes de proceder a beberlo o comerlo, puede llamar a un entendido para pedirle consejo sobre lo que es comestible o potable y lo que no, y en qué cantidad y cuándo; de modo que no se corre gran riesgo en la compra. Pero las enseñanzas no se pueden transportar en otro recipiente, sino que, una vez pagado su precio, necesariamente, el que adquiere una enseñanza marcha ya, llevándola en su propia alma, dañado o beneficiado.”




martes, 30 de septiembre de 2014

Primeros días en el instituto.


Llegué al I.E.S. al final del mes de marzo.

La acogida fue muy buena. Nada me sorprendió, nada me gustó. Lo que menos me gustó fue la gente que habla demasiado. En general mis sensaciones fueron aburridas.

El profesor es muy aburrido. Las chicas hablan sobre cosas muy infantiles como “Bob esponja” como niñas de guardería. Los chicos solo hablan de fútbol y son menos maduros. La gente en general es vieja.



Maxuel Kelwvin Lima Silva.  I.E.S. Rey Pelayo. Cangas de Onís.


lunes, 22 de septiembre de 2014