Fragmento de Protágoras de Platón


“…los que llevan las enseñanzas por las ciudades, vendiéndolas y traficando con ellas, ante quien siempre está dispuesto a comprar, alaban todo lo que venden. Mas, probablemente, algunos de éstos, querido amigo, desconocen qué, de lo que venden, es provechoso o perjudicial para el alma; y lo mismo cabe decir de los que les compran, a no ser que alguno sea también, por casualidad, médico del alma. Por lo tanto, si eres entendido en cuál de estas mercancías es provechosa y cuál perjudicial, puedes ir seguro a comprar las enseñanzas a Protágoras o a cualquier otro.

Pero si no, procura, mi buen amigo, no arriesgar ni poner en peligro lo más preciado, pues mucho mayor riesgo se corre en la compra de enseñanzas que en la de alimentos. Porque quien compra comida o bebida al traficante o al comerciante puede transportar esto en otros recipientes y, depositándolo en casa, antes de proceder a beberlo o comerlo, puede llamar a un entendido para pedirle consejo sobre lo que es comestible o potable y lo que no, y en qué cantidad y cuándo; de modo que no se corre gran riesgo en la compra. Pero las enseñanzas no se pueden transportar en otro recipiente, sino que, una vez pagado su precio, necesariamente, el que adquiere una enseñanza marcha ya, llevándola en su propia alma, dañado o beneficiado.”




miércoles, 15 de octubre de 2014

"Coxinha de frango". Bolitas rellenas de pollo.

Coxinha de frango


INGREDIENTES:
(Para 50 raciones)

Masa:
Caldo de pollo: 2 litros
Harina de trigo: 1 kilo
Margarina: 1 cucharada
Sal: 1 cucharada

Relleno:
Pechuga de pollo: 1Kilo
Cebolla: 2 medianas
Perejil: 1 pocillo
Ajo: 2 dientes
Aceite de oliva: 1 chorro
Pimienta molida: Al gusto

Empanado:
Agua: 1 litro
Clara de huevo: 2
Sal: 1 pizca
Pan rallado: 2 Kilos
Harina de trigo: 2 tazas de té


PREPARACIÓN:

Para la masa:

Poner en una cazuela el caldo, la margarina y una cucharada de sal. Llevar a la ebullición.

Añadir la harina y con la ayuda de una cuchara de madera mezclar hasta que la masa despegue de la cazuela.

Retirar del fuego y colocar sobre una superficie engrasada con margarina.

Dejar enfriar pero amasando para que no se reseque exteriormente y reservar.

Para el relleno:

En una cazuela poner el aceite, el ajo machacado, la pimienta molida y la cebolla picada. Freír hasta dorar.

Añadir la pechuga de pollo cocida y desmigada y rehogar unos minutos y añadir la sal.

Retirar del fuego, añadir el perejil picado y dejar enfriar.

Para el montaje:

Con las manos engrasadas con un poco de mantequilla, coger una porción de masa y hacer una bola.

Con la ayuda del dedo índice hacer una cavidad de forma que las paredes no queden muy delgadas.

Introducir el relleno y cerrar el agujero con los dedos.

Para empanar:

Mezclar el agua y las claras y batir con un tenedor unos minutos.

Añadir la sal y la harina poco a poco para evitar los grumos.

Bañar las bolas preparadas en esta mezcla, escurrir y rebozar en harina.

Repetir esta operación, esto hará que queden más  crujientes.

Para freír:

En una sartén grande poner abundante aceite.
Calentar bien (200º C).

Freír las bolas de pocas en pocas para que el aceite no enfríe y las bolas no se rajen.

Esperar a que estén bien doradas, sacar y escurrir.


Buen provecho.

Maxuel Kelwvin Lima da Silva. IES Rey Pelayo. Cangas de Onís.


2 comentarios:

  1. Una receta muy interesante y muy bien explicada.
    Me recuerda un poco a nuestras croquetas. El rebozado me parace muy original, yo nunca lo he hecho así. Intentaré hacerla y te contaré como me ha salido.
    Gracias por compartirla.
    Un saludo.

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  2. Me gusta tu receta. Ya la probé en Brasil. La compré en una panadería próxima a mi casa de Araguaçu, Tocantins. Hasta luego.
    Evellyn.

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